“Desde que estoy aquí sentado, nadie me ha presionado”

ENTREVISTA. Joseph Dager, presidente ejecutivo del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú, que maneja TV Perú y Radio Nacional, niega presiones y tensiones internas en su gestión y explica que garantizará la independencia y neutralidad de los medios de comunicación estatales, mientras reflota el canal TV Noticias 7.3.

“Desde que estoy aquí sentado, nadie me ha presionado”

POR RODRIGO SALAZAR ZIMMERMANN

¿Es consciente de que los cambios recientes en la programación y los recortes de algunos espacios en TV Perú han traído tensiones entre algunos de sus periodistas y el área directiva del canal?

Lo que hemos hecho, que es una propuesta de la gerencia de prensa conversada conmigo y el Consejo Directivo, está dirigido a dos cosas. La primera, repotenciar el canal de noticias [7.3 en cable], que estaba repitiendo programación del otro canal [el siete]. El otro gran cambio ha sido que, por razones de bioseguridad, haya un conductor por noticiero. Es una medida coyuntural, que hay que evaluar. Ha habido una disminución de dos programas, los dos últimos –Cara a Cara y el de deportes–, por el toque de queda.

Pero el toque de queda ha sido reducido.

Ha sido reducido hace unos días, pero no son solamente los conductores que están allí sino una serie de trabajadores –camarógrafos, técnicos, productores– que expresaban incomodidad por salir y no encontrar movilidad. Algunas movilidades las podemos dar nosotros con nuestros choferes. Varios de ellos han caído con Covid-19. Es una medida coyuntural.

El periodismo ha sido considerado, desde el comienzo de la pandemia, un servicio esencial. Los diarios cierran en horarios poco cómodos, la noticia no se adapta al toque de queda.

Pero Cara a Cara no es el único programa noticioso del canal. Al contrario. Lo que queremos ahora es que haya más noticias. Hay situaciones que debemos afrontar. ¿Esta reducción va a ser para siempre? No necesariamente. Vamos a evaluarlo.

Pero sí es consciente de que esto ha generado tensiones con algunos periodistas del canal. Así me lo han manifestado al menos tres de ellos.

He visto dos o tres tuits. He hablado, y estoy hablando, con varios conductores y periodistas. Yo no sé si tensión. Por lo menos a mí no me la han expresado. Creo que el gerente de prensa [Julio Navarro] les habló que sería hasta marzo. Quisiera que no se pierda lo esencial: reflotar el canal de noticias.

¿Qué más están haciendo en el 7.3?

Más noticias, más entrevistas. Había noticieros que no tenían entrevistas. Queremos tener pluralidad al entrevistar, ser una alternativa a otros canales de noticias. Y por supuesto que Canal 7 sigue teniendo sus tres noticieros.

¿Qué piensa acerca de que la eliminación de duplas pueda reducir el debate y la opinión?

Falta de debate no. Diría que al contrario. Es verdad que en un noticiero, cuando está conducido por dos, hay más posibilidades de diálogo. En ningún caso la intención ha sido falta de diálogo ni debate, sino tener más programas informativos, más entrevistas, tener más pluralidad, repotenciar el 7.3. Y todo bajo ciertos criterios: un medio estatal tiene una responsabilidad social muy grande que apunte a la objetividad.

Una crítica que se le ha hecho a usted es que no tiene experiencia en el periodismo ni las comunicaciones.

Esa crítica a mí nunca me ha llegado.

¿Eso no podría implicar que el barco se navegue de una manera distinta?

No. El presidente del directorio se rodea de funcionarios. Además, tenemos un Consejo Directivo, y éste está formado por dos catedráticos de primera línea y dos profesionales de las ciencias de la comunicación. En la parte periodística, toda la experiencia que se necesite vendrá del Consejo Directivo y de la gerencia de prensa.

De otro lado, también pueda ser positivo tener perfiles y perspectivas más allá del periodismo, como los de antropólogos, sociólogos. ¿Qué puede aportar usted desde la historia, su profesión, para el manejo del IRTP?

Un historiador es un periodista del pasado. El historiador está entrenado para manejar calidad de información, para saber que siempre tiene que haber varias versiones. Además, y quizás es lo más importante, un científico social puede dar un marco más amplio a un medio público o estatal.

Hay un problema presupuestal en el IRTP. Tengo entendido que este año el presupuesto se ha reducido cerca de 30%, a unos S/.80 millones.

No se ha reducido tanto. Se ha reducido más o menos en S/.8 millones entre el 2021 y el 2022, un 10% ó 12%. Si lo comparas con el 2015, ahí sí tenemos una reducción que pueda llegar al 30%. Cuando teníamos un presupuesto cercano a S/.100 millones o un poquito más, podíamos hacer muchas mayores cosas. Mi idea es que el Estado entienda que un canal estatal debe tener una mejor posición dentro del presupuesto nacional. Por ejemplo, queremos centros de producción de contenidos regionales. Quisiéramos empezar con tres pilotos que produzcan contenidos en las regiones y emitamos desde acá. Un canal nacional no solamente tiene que llegar a todo el Perú, sino que tiene que escuchar a todo el Perú. Para eso necesitamos mayor presupuesto.

¿Van a ir al Ministerio de Economía (MEF) o al Congreso para aumentar su presupuesto?

Cuando asumimos [a comienzos de diciembre del 2021] el presupuesto ya estaba cerrado. Hay algunas formas, como incorporación de saldo de balance, para incrementar el presupuesto del 2022. El lunes [24 de enero] tenemos una reunión en el MEF. Apuntamos a que el presupuesto ordinario del IRTP sea mayor en el 2023 y sostenidamente.

¿Cuál es la ejecución de presupuesto del IRTP?

Alrededor del noventaitantos por ciento.

¿Podría convenirle a un gobierno desahuciar el canal para evitarse incomodidades? Hay funcionarios de este gobierno que quisieran una línea más oficialista.

Tendría que preguntárselo al gobierno, pero no a este sino a los anteriores que son los que han reducido el presupuesto.

Hace algunos meses el ministro de Transportes y Comunicaciones, Juan Silva, fue crítico de la línea de TV Perú. Hubo injerencias durante el periodo de Manuel Merino y en el gobierno de Martín Vizcarra, cuando fue ministro de Cultura Francisco Petrozzi. ¿Siente ahora alguna presión?

Desde que estoy aquí sentado, nadie me ha presionado en el sentido que estás sugiriendo. He pedido que cualquier presión me la comenten.

¿No llegó, durante el intento de vacancia de Pedro Castillo, un pedido de un asesor de comunicaciones del presidente para entrevistar al señor Alex Starost?

El señor Alex Starost me escribió un e-mail con una denuncia pública sobre unas firmas falsas, me parece que de Avanza País. Lo consulté con el Consejo Directivo y quedamos en que lo viera [la gerencia de] prensa. En ese momento el gerente era Renzo Mazzei y quedamos en que no íbamos a difundir la denuncia. Tenía algunas cuestiones interesantes, pero podía interpretarse como que era un ataque hacia quienes propiciaban la vacancia.

Pero periodísticamente relevante. ¿Cuál fue el criterio periodístico para no tomar esa denuncia?

La evaluación que hizo la gerencia de prensa es que no era una pepa.

¿No es una pepa una denuncia de firmas falsas de un partido que está en el Congreso?

Tampoco podemos prestarnos para ser el brazo que ataca a los que promueven la vacancia.

¿Hubo una llamada de un asesor de comunicaciones del presidente Castillo para que se entrevistara al señor Starost?

A mí no me llamó.

Dos fuentes periodísticas me han comentado que luego de la salida de Renzo Mazzei de la gerencia de prensa, asesores de comunicaciones del presidente habrían movido la vacante, como buscando el perfil adecuado para el reemplazo. ¿Es así?

¿Cómo podría saberlo? Renzo pone su cargo a disposición apenas me nombran a mí. Y junto con la renuncia de Renzo ha habido otras también. Pero en el caso específico de la gerencia de prensa, y como suele suceder, recibí de muchos sitios muchos currículums.

Lo que pregunto es si le llegó alguna llamada o algún correo informando que asesores del presidente Castillo buscaban el perfil para la vacante de Renzo Mazzei.

Yo recibí currículums de varias personas, de varios conocidos, y opté por alguien [Julio Navarro] que había trabajado en el canal. Está desde la gestión de María Luisa Málaga. Me parece alguien que tiene un manejo responsable de la información. Lo recordaba en su posición de conductor, pero no lo conocía en lo personal. Si la pregunta específica es si el currículum de él llegó a través de Palacio, no, para nada.

No me refería a Julio Navarro. Conversé con él hace unos días y me dijo que su única reunión había sido con usted, que no había venido por Palacio. Preguntaba si en algún momento desde allí se intentó buscar un perfil.

Podría ser. Ahora, no he decidido sólo yo. En el IRTP no es el presidente ejecutivo quien nombra a los gerentes. El presidente propone y es finalmente el Consejo Directivo quien nombra o remueve. Palacio de Gobierno tendría que estar dominando al presidente y también a todo el Consejo Directivo, y eso no ha sucedido.

En una llamada posterior a esta entrevista, Franco Pomalaya, asesor de comunicaciones del presidente Castillo, comentó que él no intervino en la búsqueda de perfiles para la gerencia de prensa. “No sé si dentro del área se ha conversado; yo no propuse a nadie”. También menciona que no conoce el caso relacionado a Alex Starost.

El 29 de julio del año pasado juramentaron los ministros. Fue tarde: comenzaba a una hora y se dio mucho después, y no juramentaron en Justicia ni en Economía. Como la cobertura del noticiero del canal continuaba, se entrevistaron a analistas y congresistas electos, quienes criticaron la demora. Tengo entendido que un asesor de comunicaciones del presidente Castillo, que ya no trabaja con él, hizo una llamada al canal para pedir “orden”. ¿Está al tanto de eso, aunque haya sido antes de su gestión?

No.

¿Algo así ha sucedido en su gestión?

Nunca he recibido una llamada que pretenda algún tipo de injerencia, alguna orden, alguna presión. Sí, por supuesto, he tenido coordinaciones con la Secretaría General de Prensa [de la Presidencia]. Con el gerente de prensa hemos ido a ver nuestro módulo que está allí. He tenido coordinaciones con la ministra [de Cultura Gisela Ortiz] porque somos un organismo adscrito. Pero llamadas, ninguna.

Seguramente en algún momento le llegará una llamada por incomodidades en el gobierno por la cobertura del canal…

Habría que evaluar cuál es la incomodidad. Lo que he salido a decir es que nosotros no podemos ser la voz oficialista. No debemos ser una maquinaria de defensa del gobierno. Nuestra labor tampoco es ser un canal antigobiernista. Debemos aspirar a la objetividad. Y sí, debemos decirle a la ciudadanía que hay un Estado que hace cosas por su servicio. Eso no quiere decir reventarle bombos.

¿Esa va a ser la línea del canal?

Sí, es lo que he intentado decir en varios sitios: manejo responsable de la información, un periodismo que sea decente pero también haga docencia, que se aleje de las fake news, que no sea sensacionalista, que todo aquello que pongamos en pantalla esté medianamente sustentado y que tenga una programación que se afiance en los valores de la interculturalidad para contribuir y formar ciudadanía.

¿Qué garantías puede dar para que la línea del canal sea imparcial?

Que finalmente los grandes lineamientos los da el Consejo Directivo, y éste no permitiría una parcialidad progobiernista absoluta. Vengo de una institución que permanentemente ha tratado de defender su autonomía y su independencia.

La Sunedu.

Y, si llegara el caso, es lo que pienso hacer aquí también. Acepté venir porque aquí hay una gran posibilidad de hacer un poco más en grande lo que hacíamos en Sunedu: contribuir con la creación de ciudadanía en toda la población. Por eso quiero que haya más voz de las regiones, que podamos llegar a todo el territorio nacional a través de una transmisión satelital. En el mediano plazo, salir de acá. Es un local muy querido, pero es de 1975. Se nos ha quedado un poco pequeño. Queremos mejores estudios, mejores islas.

¿Qué sensación le deja que funcionarios del gobierno no opten por venir al canal? La primera entrevista del presidente fue a Hildebrandt en sus trece.

Creo que los funcionarios públicos, como ministros y viceministros, deberían utilizar el canal del Estado para hacer los grandes anuncios. Espero que [el presidente] venga. Hemos dicho que sería muy bueno.

¿Han recibido respuesta del presidente?

No hemos recibido respuesta. No he tenido el gusto de conocerlo.

¿Cuándo fue el pedido?

Hará ya un par de semanas o tres. Íbamos a tener una reunión con el presidente para reiterar el pedido, pero lamentablemente se postergó porque tuvo que ir a ver el derrame [de petróleo]. Espero que la tengamos pronto.

¿Si el presidente o sus asesores condicionaran la entrevista a recibir las preguntas previamente?

Es una buena pregunta. Habría que evaluarlo. Existe una figura que se llama preentrevista. Como preentrevista, podríamos conversarlo. Pero creo que eso no se va a dar. En la entrevista en el semanario de César Hildebrandt se ha preguntado de todo.